En sus tiempos, la cultura inca fue una de las civilizaciones más importantes de América del Sur. Concentraron tal poder político y militar que su influencia sigue viva hoy en los Andes, más de 500 siglos después de la conquista española.
Este legado es más evidente en la ciudad del Cusco, el corazón del antiguo imperio. Durante el siglo XVI, esta ciudad fue restaurada y se construyeron opulentos palacios y templos ¡algunos de ellos incluso cubiertos de oro!
Alrededor de la plaza de Armas se construyeron palacios y templos de alto nivel. Estas son las muestras más sublimes de la arquitectura inca. Los incas utilizaron técnicas avanzadas, que se adaptan a la topografía del Cusco y a los accidentes geográficos de la zona.
Y no podemos olvidar sus complicados muros pétreos. Aunque la mayoría de estos muros carecen de adornos o decoraciones complicadas, los bloques de piedra fueron tallados para que encajen perfectamente unos con otros. Aquí encontrará información relevante sobre algunas de las construcciones incas más importantes:
Este recinto solía ser la residencia de Pachacutec, el emperador Inca que inició la expansión del imperio. Durante su mandato se inició la remodelación del Cusco, y también ordenó la construcción de otras famosas estructuras incas ¡incluyendo a Machu Picchu! No sorprende que su palacio fuera uno de los más ostentosos.
A la llegada de los españoles a la ciudad del Cusco, el antiguo palacio de Pachacutec pasó a manos de Francisco Pizarro. Este palacios inca fue severamente destruido, pues hoy sólo quedan los cimientos. Qasana se ubicó en las actuales calles Plateros, Procuradores y Teqsecocha. Al día de hoy, en el lugar de este antiguo palacio sólo podemos encontrar hoteles, bares y restaurantes.
Se ubicaba a un costado del palacio Qasana, frente a la plaza de Armas. De acuerdo a las crónicas de la época, fue construido por órdenes de Inca Roca, el sexto inca. A la llegada de los españoles, fue Gonzalo Pizarro quien tomó posesión de este antiguo palacio. Hoy, en algunos de los hoteles que se ubican en esta zona, aún es posible encontrar partes de los cimientos incas de este antiguo palacio.
Perteneció al inca Viracocha, padre de Pachacuteq, y de acuerdo a los relatos de la época, era el palacio más suntuoso del Cusco. A la llegada de los españoles, este edificio fue donado a la iglesia. Tristemente, se decidió demolerlo por completo para construir en su lugar la Catedral del Cusco, y en la actualidad no quedan restos de esta estructura incas.
Cuenta la leyenda que el primer Inca, Manco Capac, construyó su palacio en la colina junto al río Saphi. Verdad o leyenda, este palacio Inca aún conserva algo de su esplendor original después de casi un milenio. Junto a este palacio se construyó la iglesia de San Cristóbal, que puede observarse fácilmente desde la plaza de Armas.
Durante la época inca, este palacio perteneció a Amaru Inca Yupanqui. Hoy en día podemos hallar en su lugar casas coloniales, construidas usando los antiguos muros incas como base. El hotel Casa Andina Catedral Cusco, por ejemplo, tiene en su lobby uno de los muros originales de este antiguo palacio.
Este palacio, que pertenecía al inca Huayna Cápac, fue asignado a Hernando Pizarro a la llegada de los españoles. Más tarde, él donó este edificio a la orden jesuita, que edificó la Iglesia de la Compañía de Jesús. Hoy se puede apreciar parte de los muros originales del Amaru Kancha en la calle Loreto.
Este palacio perteneció al inca Túpac Yupanqui, y se ubica entre las calles Maruri y San Agustín. Permaneció relativamente bien conservado hasta mediados del siglo XIX, cuando el dueño de la casona colonial quiso demolerla por completo. Afortunadamente, se logró recomprar la propiedad a tiempo, y hoy podemos observar los antiguos muros en el local del banco Scotiabank.
La piedra de los 12 ángulos es uno de los puntos turísticos más frecuentados del Cusco y una de las fotos más icónicas. Y esta piedra se halla en los muros del antiguo palacio de Inca Roca. En los muros de este palacio llaman la atención las enormes piedras, que encajan a la perfección unas con otras.Hoy, en el interior de este antiguo templo funciona el Palacio Arzobispal, que contiene el Museo de Arte Religioso Cusqueño.
La mayoría de estos antiguos palacios se encuentran alrededor de la plaza de Armas, por lo que puede visitarlos caminando desde su hotel. Ahora bien, para conocer todos los secretos y detalles ocultos tras estos muros de piedra, es mejor visitarlos acompañado de un guía de turismo.
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¡Hay tantas cosas que hacer en la ciudad de Cusco que definitivamente no te puedes perder, nos encantaría mostrarte todo lo que tiene que ofrecer para que puedas aprovechar al máximo tu experiencia mientras estás aquí!
